Entonces, ¿por qué visitar si El Salvador es el país muy pequeño, cuando el Departamento de Estado de los EE.UU. advierte permanentemente de una «crítica amenaza de la delincuencia» a los viajeros?
Porque los su surfistas que visitan el país, han encontrado por aquí algunas de las mejores olas del mundo. Unos pocos intrépidos viajeros, vienen de una curiosa escapada.
Después que el avión aterriza en el Aeropuerto Internacional de Comalapa, se puede subir en un taxi con un viaje de unos 45 minutos a San Salvador.
Los ladrones están al acecho y después de ubicar al objetivo que generalmente son los turistas que llegan a el aeropuerto, les siguen y en las partes aisladas de la carretera, hacen la emboscada en ciertos lugares en que los robos se llevan a cabo.
Para evitar llamar la atención, es útil vestirse con pantalones vaqueros y una camiseta. Llevar una humilde mochila que puede estar llena de necesidades mínimas.
Si es cierto que el crimen es un potencial de perjuicio para el turismo, la accesibilidad es un factor decisivo al momento de trasladarse.