Se había estado hablando de la posibilidad que en El Salvador se prohibiera fumar en lugares públicos como se ha hecho en otros lugares del mundo, pero finalmente el presidente ha vetado la ley, entre otras cosas porque se trataría de una medida realmente mala para todos los establecimientos, ya que la pérdida de clientes sería notable como se ha podido comprobar en otros muchos lugares del mundo con leyes similares que se han aprobado.
Es por tanto una marcha atrás para la ley que pretendía prohibir el derecho a fumar de las personas que lo quieran en lugares públicos. De todos modos se seguirá cuidando de la salud de los no fumadores, para que todos ellos puedan tener la seguridad de estar en lugares cerrados sin humo, ya que el fumador tiene derecho a fumar y el no fumador tiene derecho a respirar aire puro, para que así cada uno pueda ejercer su libertad.
Es bueno que en El Salvador no se puedan aprobar nuevas leyes que puedan dejar de lado la amplia libertad de todos los ciudadanos, ya que sería además muy perjudicial para los intereses de los bares, restaurantes y otros tantos locales en los que se fuma. Esta ley también pretendía que la promoción estuviera limitada, además de un control más férreo sobre la importación, entre otros aspectos a controlar una vez que estuviera aprobada esta ley contra el tabaco que finalmente el presidente del país ha vetado, sabiendo que podría traer más consecuencias negativas que positivas para su país.